LAVADO DE CARA

Se acercan los exámenes a una velocidad que en mis peores pesadillas y el café corre por mis venas en abundancia. El ánimo bien arriba para sobrellevar toda la mierda que se avecina en las próximas semanas y más concretamente en las 2 que vienen.

Estoy en ese punto en el que no sé como organizar las cosas, en el que hay veces que no sé o simplemente siento que no puedo seguir adelante. Me siento sola cuando tendría que estar acompañada y estoy acompañada por quien no debería.

Ilusiones y sueños de febrero quedaron rotos. Aún así avancemos. Avancemos a pesar de los millones de impedimentos que la gente nos pone. Si necesitas ayuda con alguna cosa seguro que encuentras a alguien que te ayuda desinteresadamente pero también encontraras en tu camino gente que dirá que te ayuda pero a la hora de la verdad no lo hace. Gente que no tendrá ningún problema en usarte y luego tirarte.

Y es que hay veces que de buena soy gilipollas. Si hace unos meses hubiera sabido lo que se ahora, mi vida sería distinta. No estaría agobiada por lo que por hoy lo estoy. No me vendría el bajonazo en el momento menos estresante.

Frente a todo esto, siempre sobreviven los importantes. Por algo será. Ojalá pudiera comprarle el mundo entero a quien verdaderamente se lo merece.

Nadie es mejor que nadie, sólo somos diferentes. Puedes destacar por algo pero eso no te hace mejor que el resto de personas. Acaso, ¿es tu vida mejor que la mia?

Sinceramente no envidio en nada a muchas de las personas con la que me cruzo a diario y sé algo de su vida.

NO OS DEBO NADA.

He dicho.